Surrealismo Nupcial (2)

Como parece que me he puesto un poco "Peñafiel", voy a tratar de redimirme ofrenciéndoles las fotos que nos son habituales -seguro- de la Boda. El día ha sido largo, pero fructífero... al menos a nivel fotográfico.

Empezamos con este caballero, uno de los "acampados" en el recorrido de los novios:

Otro forofo, armado de los colores de la "Union Jack":

Dos novias en busca de más príncipes (lo sentimos, pero el cupo es limitado...):

Entrenamiento patriótico para pequeñuelos:

Dos de los que suelen dar la nota, allá donde quiera que vayan... ¡Seguro!

William y su hermano durante la aparición estelar que hicieron, para saludar a todos los acampados a lo largo del recorrido:

Los Beckham llegando al acto (la condecoración es la Orden del Imperio Británico):

Gorritos no han faltado...

Y Rowan Atkinson tampoco...

Ni Elton John y compañía...

¿Dije "gorritos"? ¡Y pelucas...!

Este era el aspecto que presentaba Hyde Park, donde se instaló una pantalla gigante para seguir los actos:

The Mall, que se abrió al público tras el final del desfile de carrozas...

Y Trafalgar Square, donde había otra pantalla...

Pues ya se han casado. ¡A comer perdíces...!



Real Consentimiento

No es que me quiera poner pesado con lo de la boda famosa, pero hay algunos detallitos que creo pueden ser interesantes por desconocidos... Es el caso del Real Consentimiento que la Reina Isabel II ha promulgado, con objeto de otorgar el permiso correspondiente al príncipe William para que pueda contraer matrimonio...

...lo cual es preceptivo debido a una ley que se remonta al Siglo XVI...

...según la cual los herederos al trono, así como príncipes y princesas, han de solicitar permiso al monarca reinante a la hora de contraer nupcias (parezco Peñafiel...)

Es lo que se conoce como el "Instrumento del Consentimiento", todo ello amparado por el "Real Sello del Reino":



El encargado de llevar a cabo la tarea es Ian Denyer, del Gabinete de la Corona:



Pues nada, ya se pueden casar:

Hasta otra.

Surrealismo Nupcial

Como en todas las grandes ocasiones, el mundo de los souvenirs suele ser el gran negocio. En el caso de la boda de William y Kate este viernes que viene... pues no podía ser menos. Ahora que, para ser más original, les voy a ofrecer una pequeña recopilación de los regalos y similares más surrealistas...

Y empezamos con los capuchinos y las imágenes de los novios en chocolate:

Los peores enemigos de la jóven pareja les han serigrafiado en este horror de reloj de pared:

El manual de la boda para torpes, por si no saben qué hacer, cómo celebrarlo... o como no aburrirse durante el evento:

Un pastel de carne -imaginamos que para comérselo mientras se mira la TV-:

Homenaje retro-punk, estilo Sex Pistols:

Estas son las horrorosas monedas oficiales, acuñadas para la ocasión (si ustedes son capaces de sacarle algún parecido a esos dos sujetos... les doy nota alta):

También se ha lanzado una línea de preservativos "Joyas de la Corona"... ya me entienden...

Las delirantes patatas con los tres colores (lo que no sé es de qué... tal vez los escudos...):

No podían faltar las eternas cookies (ahórrense los comentarios, por favor...):

Y terminamos con el souvenir más surrealista de todos: la taza con las fotos de los contrayentes, que tampoco sería nada del otro mundo... salvo por el hecho de que los chinos han decidido casar a Kate ¡con Harry!

¡Genial! No me digan que no merecía la pena darse una vuelta por el tema...

Celebrando la Pascua

¿Y éstos quienes son?

 

Pues los Merkaats del Zoo de Londres.

Sus cuidadores, con objeto de que participasen también de las celebraciones de la Pascua, les regalaron estos "huevos" de papel couché, rellenos de gusanitos...

Aunque no fueron los únicos afortunados. Los cinco coatíes también recibieron la sorpresa de este conejito relleno de pasas y gusanitos...


Un saludo y Feliz Pascua.

Un paseo por Greenwich (IV)

Tras visitar la capilla, el comedor de marinos y otras estancias -salvo las estrictamente pertenecientes a la cosa de la docencia, que son privadas-, se pueden dar una vuelta por los alrededores...

...para seguir admirando el trabajo de Sir Christopher Wren...

...hasta llegar a la parte trasera, por donde saldrán en dirección al Royal Maritime Museum -al otro lado de la calle, que no tiene pérdida-... Esta es la puerta, aunque se sale por otra cercana:

Seguiremos...

Un paseo por Greenwich (III)

Viniendo por aquí desde el túnel bajo el Támesis (al fondo pueden ver la cúpula):
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Seguirán este camino que les llevará hasta la Greenwich University (que alberga también el Trinity College of Music):

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Que antes (1694) fue el "Royal Hospital for Seamen", construido originalmente por el Duque de Gloucester (quien por aquel entonces ejercía como regente de su sobrino, el futuro Enrique VI -cuya esposa, posteriomente, lo convirtió en su residencia-).

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Los sucesivos reyes -incluido Enrique VIII, que fue quien acometió las mayores ampliaciones y cambios-

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Allí dejaron su impronta John Webb -discípulo de Inigo Jones- y el inconmensurable Sir Christopher Wren, que fueron quienes le dieron el espectacular empaque que el conjunto tiene:

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El Canary Wharf se ve perfectamente desde la Universidad...

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Otros artistas aunaron esfuerzos para crear la magnífica obra: Thomas Ripley (edificio de la Reina Mary y la capilla), James Stuart (rediseño y reconstrucción de la capilla tras el incendio de 1779, así como la Enfermería cercana), James Thronhill (las pinturas del Gran Salón) y Benjamin West (las pinturas del altar de la capilla).

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Seguiremos...
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